lunes, 31 de marzo de 2008

escena marina II

El mar está estupendo hoy.
Y el cielo mejor incluso, con esas nubes pequeñas que invitan a jugar a observarlas inventando figuras tumbado boca arriba en la playa.

Aun se nota el temporal de la semana pasada en el bocado de arena que se llevó el mar y que ha dejado un escalón en la playa en el que muchos juegan a saltar como si fuesen a salir volando. Otros incluso lo consiguen, vuelan hacia el mar o hacia la costa según el viento.

Yo prefiero verlo desde este lado de la barandilla, a tu lado. No te lo he dicho, nunca hemos hablado, sólo llevamos tres horas juntos, pero ya estoy enamorado de por vida de ti. Te pareces tanto a mi. En cuanto hemos llegado al paseo marítimo has querido echar a volar sobre el mar. Lo sé porque nos hemos levantado al mismo tiempo de nuestro sitio para poder ver el oleaje sin el estorbo de los barrotes.

Me inquieta que en algún momento decidas abandonarme sin decir adiós y cuando me quiera dar cuenta ya haya cambiado el viento y no pueda alcanzarte. Por eso cuento las horas hasta que pase el próximo camión de la basura.

viernes, 28 de marzo de 2008

escena marina I



Corazón Frágil II

Ella le preguntó :

- Si a partir de ahora sólo pudieras tocar una parte de mi cuerpo ¿cuál elegirías?

Él, extendiendo su mano sobre uno de sus pechos, acarició dulcemente su pezón y le respondió:
-Tu corazón


Preguntas que no necesitan respuesta y respuestas que se esconden....Entre la oscuridad y el color, entre la ironía y el dramatismo, entre la provocación y la protesta, entre la alegría y la trascendencia sólo hay un corazón...y es frágil....ten cuidado...

martes, 25 de marzo de 2008

Corazón Fragil I

2008 d.C. II

Dos amigos suben animados en mitad de una noche de farra la calle Alfonso XIII de Córdoba (España). Acaban de tomarse un wisky con cocacola y un ron con limón en el Soul (después de varios tubitos en la Espiga) y han decidido prolongar la noche en el Underground.

Suben hablando del agua, de que cada vez hay menos. Ambos lo lamentan y recuerdan con nostalgia unas tierras fértiles y verdes que casi no alcanzaron a conocer a causa de su edad... Unos ríos que imponían al imaginar cruzarlos a nado (un puente romano que sorprendía verlo en pie, auténtico romano con un poco de reforma medieval).

A medio camino, observan a un encargado de la limpieza de la ciudad que sostiene una manguera que riega la calle. Mientras se acercan a él le ven mover con decisión la manguera limpiando con un potente chorro de agua. La basura se mueve al son del agua, de aquí a allá. Se ha movido de sitio y se ha mojado, nada más.

Al llegar a su altura, el amigo que había bebido wisky le pregunta al trabajador:

- Disculpe, ese agua ¿es potable?

El profesional, un hombre que sabe mover la manguera por el centro de Córdoba como nadie responde amable:

- Sí, ¿quieres beber un poco?

- No, gracias. Sólo echo de menos cuando salía por los grifos.- le responde una voz triste.

martes, 11 de marzo de 2008

domingo, 9 de marzo de 2008

Objetivos emparedados II

"Lo que pasa es que no sabemos lo que pasa" se decía el hombre reflexivo todas las mañana...Retorcía cada palabra, cada pensamiento; desgranaba cada mensaje político mientras buscaba alternativas en su baul ideológico...Ante la lluvia de promesas, los enfrentamientos gratuitos y la espectacularización de la política el hombre reflexivo decidió crear su propio espacio...Cada mañana de las 366 mañanas del año electoral el hombre reflexivo escribía en su cuaderno de dibujo una idea para socorrer al mundo, se esmeraba en cada palabra, en cada expresión, el idealismo de un hombre casado con la retórica del lenguaje. Por la noche, como si de un ritual se tratase salía a la calle y pegaba sus sueños en la pared, siempre en la misma pared, un sueño tras otro, formando una almohada de hojas de cuaderno de dibujo arrugadas, frias, humedas, desengañadas.....objetivos emparedados, uno tras otro, 366 ideas recubiertas de pegamento, reflexiones empolvadas, miradas de reojo, contempladas con detalle, despreciadas, admiradas...las urnas se cerraban y su pared sangraba....
La última noche el hombre reflexivo se miró en el cristal de un escaparate, era una tienda de antiguedades a unos escasos metros de su pared de sueños, contempló su reflejo y pensó....No, no siempre fui tan feo, pero el mundo tampoco está nada guapo....