domingo, 7 de febrero de 2010

viernes, 5 de febrero de 2010

Bajo el Contrabajo II

Si miran ustedes hacia arriba podrán ver las cuatro cuerdas de nilon.

Este novedoso sistema, además de generar música ambiente basada en frecuencias graves, que hacen que nos vibre el pecho con un cosquilleo delicioso... como decía, además de la música ambiente, nos sirve para regular el tiempo.

Si pulsamos una de ellas, la más gruesa, truena. Si tocamos dos con cierto ritmo, está nublado pero no llueve tanto. Con tres rítmicas pulsaciones, hechas con arte, hace muy buen día. Es un sistema estupendo que nos ha permitido dejar de mirar al cielo para organizarnos porque aquí el tiempo es...


- Disculpe señor guía ¿Qué ocurre cuando suenan las cuatro cuerdas?

Eso no suele ocurrir... pero los días que suenan las cuatro, no paramos de bailar en todo el día. Así es la vida bajo en contrabajo.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Bajo el contrabajo

Sexo vegetal II



Sus cuerpos se fundieron en un orgasmo animal vegetal. Ella era la flor más sexy de la tierra, él una avispa macho irremediablemente atraído por la belleza de la ophrys iricolor. Su forma, sus curvas, sus colores, y sobre todo su olor…Se parecía tanto a su amada avispa...Había caído en el engaño sexual de la orquídea.


Las flores de la orquídea imitan la forma, el color y las feromonas de las hembras de sus polinizadores. Hay miles de especies de orquídeas, cada una de ellas se parece a una especie de polinizadores. Flores e insectos se funden en un solo cuerpo. Hojas testiculares que durante años se creyó que surgían del semen derramado por los animales durante el apareamiento.


El ladrón de orquídeas descubrió entonces que ella era la ladrona, ladrona de sexo.

lunes, 1 de febrero de 2010

Sexo vegetal

Hucha de deseos II

Al ver que le pedían 'sus pesetas' se sintió contrariado.

Una moneda que se había extinguido hacía 9... ¿10 años quizá? Las había perdido de vista, incluso había olvidado quién aparecía en los billetes, como para encontrar una que tuviese el poder de cumplir sus deseos, o revelarle los de los demás. Se fue.

Dando la segunda vuelta de llave en la puerta de casa comprendió cómo podía acercar sus deseos, ¿o 'usa tus pesetas para mejorar este barrio' no significaba realmente: 'usa tus recuerdos para mejorar este lugar'?

Dio la vuelta, echó un euro sin mucha fe en el futuro de la moneda, y le dedicó una sonrisa al oído del mundo.